Viernes 23 de febrero de 2018
Avanza nueva Ruka Lawen para Hospital Peñablanca y Asociación Mapuche Witrapuran
Osvaldo Cheuquepan Colipe, es un experimentado constructor de rukas mapuche (conocidos como “rukafe”).
Con su equipo de trabajo, está levantando la nueva ruka del Hospital de Peñablanca, administrada por la Asociación Indígena Witrapurán, un dispositivo de salud intercultural que cuenta con financiamiento del programa de Salud y Pueblos Indígenas (PESPI) del Servicio de Salud Viña del Mar Quillota, la cual sufrió un atentado incendiario en septiembre del año 2017.
Osvaldo explica: “Esto viene de familia. Mi familia hace rukas, a mí nadie me enseñó, lo heredé de las personas del sur, de mis abuelos que eran de Lautaro. Para construir una ruka hay que tener unas condiciones especiales, por ejemplo, cuando hay Machi trabajando, las rukas deben tener la puerta siempre hacia la salida del sol. Para los materiales, nosotros ocupamos varas, coligües y madera. También le vamos a poner un revestimiento más moderno para el frío del invierno”.
Osvaldo ha construido rukas para las comunidades mapuches en casi todas las comunas de la región Metropolitana como: La Florida, Recoleta, Lampa, Maipú; también en otros lugares del territorio nacional como Osorno, Galvarino y Lautaro.
Pronto el Hospital y la Asociación contarán con una nueva ruka para continuar realizando sus atenciones de medicina mapuche, en el marco del Programa de Salud y Pueblos Indígenas (PESPI), que incluyen la atención de una agente médico Machi y una Lawentuchefe, terapeuta experta en hierbas medicinales.
I N A U G U R A N M U R A L D E D I C A D O A L A S A V E S A N C E S T R A L E S
Como parte del cierre del taller de muralismo, “Parque de nuestras aves ancestrales”, el artista Daniel Marceli, entregó a la Asociación Witrapuran un bello mural dedicado al “ Pitiwe”, un ave ancestral ampliamente valorada por la comunidad mapuche, a la cual se le atribuyen poderes secretos que derivan del alimento que consume, una planta con propiedades medicinales.
Se dice que en el bosque donde se ubica la ruka en el hospital de Peñablanca, habita una familia de pitiwes, cuyo canto característico se escucha en los alrededores del parque. Ahora los usuarios y pacientes podrán disfrutar de este bello mural junto al hermoso canto de estas aves.